El Norwegian Breakaway atracó esta tarde de viernes en Barcelona con un permiso especial de las autoridades españolas para desembarcar algunos tripulantes que todavía permanecían a bordo.
Se trata de 140 tripulantes que tienen vuelos reservados para sus países de origen. Presuntamente el barco permanecerá varios días en Barcelona, de forma que los tripulantes puedan coger los respectivos vuelos reservados. Una vez termine esta operación, el barco se dirigirá a Marsella para operaciones de mantenimiento.