En el astillero Fincantieri de Monfalcone, cerca de Trieste, se levanta poco a poco el noveno barco de la flota de TUI Cruises: el Mein Schiff Flow, una de las grandes apuestas de la compañía alemana para 2026. Aún en construcción, este nuevo buque promete combinar diseño innovador, bienestar y sostenibilidad en una experiencia de crucero completamente renovada.

Un vistazo entre cascos y sueños
Visitar un astillero es como mirar el futuro antes de que tome forma: cascos desnudos, cables colgando y estructuras que pronto se convertirán en espacios de ensueño. Así lo describe el recorrido por el interior del Mein Schiff Flow, donde cada cubierta comienza a transformarse en un destino vacacional flotante.

El nuevo barco será el segundo de la clase “Intuition”, tras el Mein Schiff Relax, y contará con 19 cubiertas y capacidad para casi 4.000 pasajeros. Su estreno está previsto para el verano de 2026, con itinerarios de entre 9 y 11 días por el Mediterráneo, con salida y regreso desde Palma de Mallorca.
Espacios luminosos y diseño inspirador
El diseño del Mein Schiff Flow pone el acento en los espacios abiertos, la luz natural y el bienestar. Su espectacular atrio central, que abarca las cubiertas 3 a 5, se bañará de luz gracias a enormes ventanales, mientras que los colores y materiales interiores evocarán el mar y la calma.

Entre sus rincones más destacados figuran el Mistral Deck (cubierta 19), donde los pasajeros podrán relajarse en una sauna con forma de barril de vino o practicar ejercicio con vistas al océano; el Bar 17 junto a la gran piscina de 25 metros; y el espacio Ágora, inspirado en una plaza griega con música en vivo, piscina infinita y ambiente mediterráneo.
Los restaurantes y bares también apuestan por la luz y las vistas panorámicas. El comedor principal Atlantic, el Bistró Surme de estilo francés y el Captain’s Bar en la proa ofrecen escenarios privilegiados para disfrutar del paisaje marítimo.
Diversión y relax a bordo
A bordo del Mein Schiff Flow, el entretenimiento se adapta a todos los gustos. El teatro, que ocupa tres cubiertas, permitirá transformar su espacio según el espectáculo o actividad, y el D4 Nightclub promete animadas noches de baile. También regresará el característico burlesque bar Lash, con actuaciones inspiradas en los años veinte.
El spa y la zona de saunas ocuparán un lugar destacado dentro del concepto “Premium Inclusive” de TUI Cruises, que incluye el acceso sin coste adicional. La oferta de camarotes abarca desde opciones individuales hasta suites y, por primera vez, el 85 % de las cabinas dispondrán de balcón privado.
Un compromiso real con la sostenibilidad
Durante la visita, la CEO de TUI Cruises, Wybcke Meier, subrayó que la sostenibilidad ha sido clave desde el diseño inicial del barco. El Mein Schiff Flow contará con motores de combustible dual, capaces de funcionar con gas natural licuado (GNL), biogás o combustibles de bajas emisiones, además de estar preparado para conectarse a la red eléctrica del puerto en destino.
“Todas estas medidas nos acercan cada vez más al objetivo del crucero neutro en carbono”, destacó Meier.
Un barco que invita a fluir
El recorrido concluyó con una promesa: volver a bordo cuando el Mein Schiff Flow esté listo para su viaje inaugural en el verano de 2026. Un barco que encarna el espíritu del bienestar, la innovación y la elegancia relajada que caracteriza a TUI Cruises.
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